viernes, 27 de julio de 2012

Los derechos de autor y los honorarios del artista visual continúan exentos del IVA


El aumento de 13 puntos del IVA (del 8% al 21 %) que el artista tendrá que repercutir sobre el precio de venta de su obra a partir del 1 de septiembre, es un grave error de política fiscal sobre la cultura que tendrá nefastas consecuencias sobre el ya débil y exhausto mercado del arte.
 
No obstante, el objetivo de este texto es comentar la exención que se mantiene sobre la prestación de servicios del artista visual y, más concretamente, sobre los honorarios por la exposición pública de su obra. Si viene es cierto que como consecuencia de los recortes de los recursos públicos se han reducido las exposiciones y actividades de difusión, hay que informar a la comunidad artística de los todos los efectos del reciente Real decreto Ley 20/2012.

Hace pocos días, Josep Guiu, abogado y miembro de los servicios jurídicos de la AAVC nos recordaba a un primer informe sobre el impacto de la reforma del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) que “la exención contemplada en el articulo 20.1.16 de la Ley del IVA, no se ha producido ninguna modificación. Este artículo dispone: “Estarán exentas de este impuesto las siguientes operaciones:.. los servicios profesionales, incluidos aquéllos cuya contraprestación consista en derechos de autor, prestados por artistas plásticos, escritores, colaboradores literarios, gráficos y fotográficos de periódicos y revistas, compositoras musicales, autoras de obras teatrales y de argumento, adaptación, guión y diálogos de las obras audiovisuales, traductoras y adaptadores”.

“Así pues –concluye Josep Guiu- de la reforma operada por el Real decreto Ley 20/2012 se desprende que los servicios profesionales de artistas y el cobro de derechos de autor, se mantienen exentos del impuesto, por lo tanto, el artista no tendrá que repercutir IVA en sus facturas que emita por estos conceptos”.

La principal conclusión del mantenimiento de esta exención es que los honorarios que todo artista debe cobrar por su participación a una exposición, programación o acontecimiento continúan exentos de IVA.
 
En un lenguaje coloquial, incluso profesional, podemos convenir que por el hecho de exponer una obra o exhibir un vídeo, el artista tiene derecho a recibir una remuneración, unos honorarios o fee. Pero si trasladamos este principio a la esfera jurídica nos encontramos ante una cesión temporal y limitada de uno de los derechos de autor de explotación fundamentales que la Ley de Propiedad Intelectual española (LPI) otorga al artista plástico o visual: el derecho de Comunicación Pública. El apartado 1 del artículo 20 de esta ley establece: “Se entenderá por comunicación pública todo acto por el cual una pluralidad de personas pueda tener acceso a la obra sin previa distribución de ejemplares a cada una de ellas”. Y el apartado 2 del mismo artículo dice “Especialmente, son actos de comunicación pública:... h) la exposición de obras de arte o sus reproducciones”.

De forma que el artista visual tiene reconocido el derecho de explotación de Comunicación Pública sobre su producción en régimen de monopolio y con una sola limitación –la que establece el artículo 56 de la LPI- que comentaremos a otra ocasión.

Al tratarse de un derecho de explotación del artista, es él –y sólo él- quien puede cederlo de manera temporal y limitada a una institución (museo, centro de arte, fundación, festival) para que esta lo ejerza mientras dure la actividad y en los espacios donde se celebre. Esta cesión, insistimos, se produce a cambio de una remuneración económica. De ahí que el conjunto de estos derechos reciban el nombre de derechos de explotación.
Otros derechos de explotación son el de reproducción, el de distribución y el de transformación.
 
El derecho de Comunicación Pública, en la vertiente de exposición de obra, no lo gestiona VEGAP y por este motivo no lo tiene tarifado. VEGAP sólo lo gestiona para algunos videocreadores y por la emisión televisiva de las obras de los artistas visuales a los que representa.

Cabe la posibilidad que el artista renuncié a ejercer este derecho y otros que tiene reconocidos y que ya hemos citado. Por desinterés o porque opta, de manera consciente y libre, por colocar su obra bajo una licencia tipo Creative Commons, a pesar de que, generalmente, estas licencias se emplean para casos de reproducción (en libros, revistas o catálogos impresos o difusión on line) y no para la exposición de obra.

Desde el conjunto de las asociaciones profesionales del Estado, recomendamos a los artistas que pongan precio a esta cesión temporal y limitada de su derecho de Comunicación Pública. Un precio que hemos fijado en un mínimo equivalente al 15 % del coste total de la exposición o programa en el cual el artista participa. A repartir, lógicamente, entre todos los artistas implicados con ocasión de un acontecimiento colectivo.

Así lo hemos expuesto en el Manual de Buenas Prácticas Profesionales en las Artes Visuales así se informa a través de los servicios de asesoría jurídica o profesional o en los cursos de Formación Continúa que ofrece algunas asociaciones.

La otra consecuencia importante de explotar el derecho de Comunicación Pública en la vertiente de exhibición de la obra visual es que su cesión –como la de cualquiera otro derecho de explotación- se debe hacer por escrito. El artículo 45 de la Ley de Propiedad Intelectual establece “Toda cesión deberá formalizarse por escrito. Si, previo requerimiento fehaciente, el cesionario incumpliere esta exigencia, el autor podrá optar por la resolución del contrato.” Y esta es, precisamente, la base jurídica del uso obligatorio del contrato por escrito. Y así mismo consta, de manera clara y explícita, en los modelos comentados de contratos de nuestra Guía de Contratación del Artista Visual y, más específicamente, en los modelos de contratos para la exposición de obra preexistente o para la exposición de obra nueva.

Así pues, en las facturas que el artista emite por sus honorarios o, dicho en términos jurídicos, por la cesión temporal y limitada del derecho de Comunicación Pública no repercutirá el IVA.

No obstante, el Real decreto Ley 20/2012 modifica a la alza la retención del IRPF que, a partir del 1 de septiembre de 2012 y durante todo el ejercicio 2013 pasa del 15% al 21%. Este aumento será transitorio y bajará al 19 % a partir del 1 de enero de 2014.

Florenci Guntín, secretario general de la AAVC
26 de julio de 2012

viernes, 29 de junio de 2012

Un artículo sobre la piratería que no va a gustar a nadie


Estamos más cerca de centrar el debate en lo que importa: la crisis de contenidos. ¿Interesan realmente a los consumidores los contenidos que crean las industrias y están dispuestos a pagar por ellos?

LA VANGUARDIA. Cultura | 28/06/2012.
Alberto Vicente y Silvano Gozzer
La “piratería” de contenidos es uno de los temas que más controversias genera en la red entre industria y usuarios. Hasta la propia definición está en entredicho: descargas ilegales, acceso libre, intercambio, actividades extramercado, etc. No hay duda de que la palabra piratería fue introducida por las industrias creativas (cine, música y libros) para referirse a los usuarios que accedían a contenidos protegidos por el copyright descargándolos de Internet, pero también para hacer alusión a los servidores que se encargaban de recoger en su seno todo el contenido y que buscaban un lucro a través de terceros como, por ejemplo la publicidad o las suscripciones.

Desde la llegada de Internet ha habido un enfoque perjudicial para ambas partes implicadas al convertir una tecnología (la descarga de archivos de Internet) en problema moral: está mal descargar gratuitamente contenidos protegidos por copyright. Este enfoque ha sido, y es todavía, alentado por otros actores como los medios de comunicación, que en muchos casos han actuado como parte interesada; o los políticos, que no han sabido legislar, al final, a gusto de nadie.

Este enfoque nos ha llevado a la división de la sociedad entre buenos y malos sin saber muy bien dónde se encuentra cada una de las partes. Mientras la industria instaba a los Gobiernos a hacer campañas que apelaran a la moral (“si eres legal eres legal”), los internautas demonizaban a las gestoras de derechos y a los políticos que legislaban en cualquier sentido que no fuera el de permitir la libre descarga sin restricciones. Ángeles González-Sinde pervivirá en el imaginario popular como una suerte de Cruella de Vil de lo digital.

Lo cierto es que la piratería afecta más a las formas de comercialización de contenidos que a la moral. Es decir, es un problema comercial y no ideológico. Internet ha supuesto un revulsivo serio para las industrias creativas, como se vio en la música, en la televisión y, más despacio, en los libros, obligando a una reconversión en el sector de contenidos. No solo ha evolucionado la tecnología, sino que esta ha sido capaz de cambiar los hábitos de los consumidores. Dado que es un problema comercial, las soluciones deberían plantearse con este enfoque por parte de la industria.

La piratería no puede ser un problema moral porque no hay consenso social para que así sea. Además, es inútil legislar mediante leyes que difícilmente pueden ser aplicables. Se descarga y se comparte música, libros y películas simplemente porque es posible hacerlo. Es muy difícil penalizar este acto por mucho que algunos países como Francia, y ahora España, hayan vivido la ilusión de que es realizable. Cada vez que se intenta bloquear un sistema, se crean otros que los reemplazan (P2P, streaming, descarga directa, torrent, gnutella, etc.).

Otra cosa es que la industria ofrezca una resistencia al cambio, comprensible dentro del marco de la necesidad de reajustes en las cadenas de valor y la desaparición, en algunas ocasiones, de algunos intermediarios. Centrar la discusión de la industria en la piratería distrae de los verdaderos problemas a los que se enfrenta: la reconversión obligada por los nuevos modelos de consumo de contenidos.

Metáforas, cultura y subvenciones

El empleo de metáforas para explicar la superioridad de una u otra postura no ha ayudado a explicar el mundo digital. Una de las metáforas más empleadas es la de referirse a los intentos por legislar contra las descargas gratuitas de material protegido como “poner puertas al campo”; mientras que la otra parte replica que el campo puede ser vallado y, en caso de que un desconocido entre, se puede llamar a la Guardia Civil.

Lo único que demuestran estos argumentos es la falta de comprensión de las singularidades de Internet y de la futura (presente) sociedad digital. También podría ser que algunos de los que los utilizan tengan una comprensión bien clara del tema y un interés oculto en desinformar a la sociedad.

La mezcla entre cultura, ocio y negocio tampoco facilita las cosas para llegar un acuerdo. Algunos usuarios argumentan que la cultura debe ser libre y por ello justifican las descargas gratuitas de contenidos protegidos. La cultura puede ser libre, lo que no significa que haya de ser gratis (en inglés se confunde el término al utilizar una misma palabra: free). La libertad en la cultura tiene más que ver con la censura que con el derecho de descargar cualquier contenido sin tener que pagar precio alguno. Siempre ha habido alguien que ha pagado por la cultura: hace unos siglos los mecenas y ahora el usuario o las instituciones públicas o privadas.

Más peligroso aún es el argumento de la “muerte de la cultura” a manos de la piratería, como si el negocio fuera el garante final de la creación cultural. En cualquier caso estará acabando con las empresas culturales y no con el hecho cultural, que es inherente al ser humano. La creatividad cultural está por encima del negocio. Otra cosa es que la “cultura de pago”, un invento relativamente reciente, del siglo pasado, sea deseable, ya que facilitó el gran boom de las artes que se vivió durante décadas en el cine, la música y los libros, y que fue posible gracias al auge de la clase media que pagaba por ella.

Lo que sí parece estar “muriendo” es un tipo de cultura, habida cuenta de que, hoy por hoy, gran parte de la población no parece dispuesta a pagar por ella como lo hacía antes. Urge por tanto que la industria, si quiere seguir siéndolo, encuentre las soluciones que garanticen a los consumidores el acceso a bienes culturales de pago que generen experiencias mejores que las gratuitas.

Uno de los argumentos más comúnmente esgrimidos por algunos usuarios es que, dado que muchos bienes culturales están subvencionados, deberían ser de acceso gratuito. Lo cierto es que las subvenciones son ayudas con las que las Administraciones buscan promover la creación cultural, lo cual forma parte de sus competencias y obligaciones. Lo que se debería poner en cuestión, por lo tanto, no son las subvenciones en sí, su espíritu fundamental, sino el decepcionante resultado de ciertos productos culturales que se han beneficiado de ellas, y el mal uso de las mismas que han podido hacer algunos beneficiarios públicos y privados.

Piratería, gobierno y gestoras de derechos

La verdad es que el papel del Gobierno no es nada sencillo. Por un lado debe garantizar las libertades digitales de los usuarios, y por el otro proteger una industria que genera el 3,21% del PIB y emplea a más de 500.000 personas.

La presunta apropiación indebida de fondos por parte de algunos directivos de la SGAE tampoco ha ayudado precisamente a ver con buenos ojos la gestión de estas entidades. Si los hechos no hubieran demostrado la mala fe con la que actuaron algunas personas dentro de esta organización de gestión de derechos, el canon no parecería una mala opción para garantizar una compensación justa a los autores. La realidad, sin embargo, fue bien distinta: la industria abusó en su aplicación; mientras dejaba fuera del reparto a miles de autores continuaba persiguiendo a los usuarios que realizaban descargas de contenidos.

Todo ello ha provocado la ruptura de un modelo, malo pero que funcionaba, para pasar a una compensación que no resuelve la distribución justa a los autores, con cargo a presupuestos generales del Estado en un momento delicado para la economía española; y la entrada en vigor de una ley que es difícilmente aplicable, por mucho que veamos a algunas webs cerrar temporalmente. La responsabilidad del Gobierno aquí es evidente, por haber sido incapaz de controlar a las entidades de gestión.

Piratería y creadores

El eslabón más débil de toda la cadena es el creador. La industria justifica en su nombre las presiones al Gobierno para erradicar la piratería; sin embargo, en muchas ocasiones, es la parte de la cadena de valor que menos dinero se lleva. Los creadores tienen derecho a “intentar” vivir de sus obras, pero en ningún lugar está escrito que el solo hecho de crear algo otorgue el derecho a que esa creación se convierta en sustento, medio de vida.

Dejar en manos de los usuarios (es decir, los consumidores de contenidos creativos) la responsabilidad de la recompensa a los creadores no parece la mejor solución. La construcción de modelos de negocio rentables y justos para los creadores es responsabilidad de las industrias culturales y, desde luego, ese modelo no pasa tanto por la persecución inútil de los usuarios, ni siquiera por cerrar los sitios de enlaces (aunque es necesario cerrarlos para construir modelos sanos) como por idear una oferta alternativa que justifique el precio a los consumidores.
Piratería y libros

Y finalmente llegamos a la piratería de los libros, donde la implementación de sistemas como el DRM (gestión de derechos digitales) o sistemas anticopia está lastrando el desarrollo de la edición digital. La industria editorial, al igual que lo hizo la música -y fracasó-, está promoviendo el uso de estos sistemas de protección para evitar que los usuarios compartan los libros. Es decir, si accedo a la oferta de libros de las editoriales compro un archivo defectuoso que no podré compartir con nadie, pero si accedo a la oferta extramercado, me “llevo” un archivo que puedo compartir y que no tiene ninguna de las limitaciones de uso que la industria impone a quien ha pagado por el libro. Por no mencionar las dificultades añadidas al proceso de compra en algunas plataformas de venta de libros electrónicos.

Como se puede ver, se vuelve a situar en el centro de la discusión la piratería y no cómo llegar a los consumidores, que han cambiado sus hábitos y su forma de acceder a los contenidos con una oferta consistente y amplia. Desde luego, las cifras no ayudan más que a aumentar la confusión. Cuando se habla de piratería de libros se cifran las pérdidas en miles de millones de euros; pero, curiosamente, cuando se habla del potencial del mercado digital los datos no suelen pasar de unos pocos millones.

Como sociedad estamos cambiando y madurando respecto al uso y consumo de contenidos digitales. Las industrias culturales aún miran con cierto recelo el fenómeno de Internet y no terminan de confiar en los usuarios. Sin embargo, no hay duda de que, tarde o temprano, habrá una normalización de los modelos de negocio en Internet, y de que dejaremos de hablar de “piratería” y recordaremos este momento como un tiempo de transición. Eso no significará que se haya erradicado, pero los usuarios que accedan a la oferta de pago podrán hacerlo sin cortapisas y a precios adecuados.

No se ve de qué modo sería mejor una sociedad solo por el hecho de que todos los contenidos fueran gratuitos, de modo que esa cuestión no es lo que se discute aquí. Vivimos un momento de transformación que genera desajustes, pero cada vez estamos más cerca de centrar las discusiones en lo verdaderamente importante: la crisis de contenidos. ¿Interesan realmente a los consumidores los contenidos que crean las industrias y están dispuestos a pagar por ellos?
Alberto Vicente (@alvicente) y Silvano Gozzer (@gozque) son socios fundadores de http://www.anatomiadered.com, empresa consultora en estrategia editorial y de contenidos, y autores del blog http://www.anatomiadelaedicion.com"

jueves, 7 de junio de 2012

Comentario de Angel Pascual Rodrigo, un integrante de REFUNDANDO VEGAP

He formado parte de la candidatura REFUNDANDO VEGAP por un ejercicio de responsabilidad con el colectivo de artistas visuales con la misma actitud y entrega que durante mi presidencia de la Asociación de Artistas Visuales de las Islas Baleares.
_ Para continuar desarrollando nuestras reflexiones en este blog vuelvo a plantear algunas cuestiones que ya hice en el momento de la campaña electoral.

_ Quizá pocos sepan que el sistema de votación en Vegap es ponderado, como si fuera una sociedad anónima, pero no en función de lo que has pagado sino de lo que has cobrado. Por ello resulta un sistema que propicia la corrupción y la confabulación entre los ejecutivos y quienes más recaudan, dejando desprotegidos y marginados a los socios más humildes y al arte de base en general. Es una pescadilla que se muerde la cola.
Se parece a lo ocurrido en la SGAE. Si se quiere lograr una desvinculación clara de esa pésima gestión de la SGAE y la horrible imagen que se ha ganado a pulso ha generado hay que cambiar el sistema electoral.
Habría soluciones intermedias a considerar, como que ese factor no fuera una proporción aritmética simple sino una proporción de raíz cuadrada o cúbica. Parece complicado pero para cualquier base de datos resulta muy sencillo. Espero tener ocasión de demostrar que sería mucho más justo.
También sería necesario que el consejo de Vegap se forme en proporción a los votos obtenidos. Es algo fundamental. Imaginen que el Congreso del Estado de un país se formara sólo por miembros del partido que haya sacado más votos ¿cómo llamaríamos a ese sistema?, pues de ese modo se forma el consejo de VEGAP hasta ahora.
 

_ Los sueldos de los ejecutivos de Vegap resultan escandalosos y se han de ajustar a la realidad del mercado y de la situación en España. Corrían rumores que escandalizaban sobre los sueldos de algunos de ellos –no de los artistas del consejo de administración–, se decía que habían ido creciendo junto al porcentaje que se queda Vegap de lo que cobra en nombre de los artistas, a la par que disminuían de ayudas a las asociaciones de artistas. 
Aquellos rumores se van corroborando: En facebook.com/RefundandoVegap están los datos. 
Y la comisión que se queda ahora Vegap es del 40 %, frente al 20 % que nos decían hace unos años.

_ Recordemos que cuanto más apetitoso es el bocado más aumenta la posibilidad de corrupción y de complot entre los que más perciben.


_ VEGAP debe colaborar con CREATIVE COMMONS y otros modelos de gestión de derechos. Nadie puede obligar ni demonizar a nadie por optar por un sistema o por otro. Hemos podido comprobar tácita y expresamente la mala actitud de VEGAP al respecto. Debe cambiar si se define como entidad de gestión de los derechos de los creativos. Sólo con un cambio de actitud se logrará que la propia sociedad valore más esos derechos que dimanan del valor intrínseco y necesario de la aportación continua y generosa de los artistas hacia los demás.


_ Cuentan que el trato de VEGAP hacia los «pagadores» de derechos es pésimo y se ha de olvidar que representan a los artistas. Ese no es modo en que queremos que se nos represente. La cortesía y afabilidad no está reñida con la firmeza. Como mínimo se ha de hacer una campaña convincente en contra de la imagen que poco a poco se ha extendido de VEGAP.

Con los mejores deseos
Angel Pascual Rodrigo 

martes, 5 de junio de 2012

Las actas de VEGAP ni se cambian, ni se enmiendan (cruce de e-mails con el secretario de VEGAP)


Queridos Javier, Bea y Antón:
He recibido las actas de la Asamblea de Madrid, y no me parece que reflejen adecuadamente lo que allí se dijo. Qué se hace en estos casos? Se impugnan, se sugieren redactados alternativos...?
Perico Pastor

El mié/30/may/2012, a las 17:05, Vegap escribió:
Querido Perico:
Me han remitido el correo electrónico en el que haces una consulta sobre cómo proceder porque consideras que el acta de la Asamblea General no refleja adecuadamente lo que se dijo en la misma.
Como soy el Secretario del Consejo de Administración que actuó en la Asamblea, me gustaría saber por qué has hecho esa valoración. ¿A qué intervenciones te refieres y por qué crees que no se reflejan adecuadamente?
Quedo a la espera de tus noticias.
Andrés Nagel
Vicepresidente
Secretario del Consejo de Administración
VEGAP
 
 
De: perico pastor
Enviado el: miércoles, 30 de mayo de 2012 18:46
Para: Vegap
Asunto: Re: Tu consulta
Querido Andrés:
Me refiero a dos puntos concretos (aunque creo que alguno de los asistentes tiene más que aportar). El primero es que no se hace ninguna mención de la discusión respecto a nuestro ruego, ya expresado en la preAsamblea de Cataluña, de que se dedicara una parte, aunque pequeña, del tiempo, a que cada una de las candidaturas expusiera su programa –y sobre todo, en nuestro caso, las razones por las que por primera vez en la historia de VEGAP, se presentaba una candidatura alternativa. Ya sé que no estaba en la orden del dia (por qué no, cuando el ruego se habia expresado en la pre Asamblea, es una buena pregunta) pero fueron diez minutos de forcejeo entre Antón y yo, y deberian estar reflejados en el acta. El segundo, referente a la discusión entre Javier y yo respecto a la diferencia entre algunos autores y otros, se limita a decir que yo protesté porque a Picasso se le paga con mayor celeridad, y no fué esa mi queja: deberia explicitar que a Picasso se le liquida trimestralmente y a mi se me deben facturas no pequeñas, desde octubre de 2010 (cobradas por VEGAP hace tiempo). Eso es lo que hay no es algo que yo crea: el acta peca por omision e imprecision. Por eso sugiero corregirlas, o impugnarlas si os parece que es algo que yo creo.
Atentamente
Perico
 
 
El jue/31/may/2012, a las 11:34, Vegap escribió:
Querido Perico:
Muchas gracias por tu correo.
En relación a tus comentarios, me gustaría hacerte las siguientes consideraciones:
1.- Tu intervención inicial para pedir un debate electoral fuera del orden del día, fue atendida por el Presidente. En relación a tu afirmación de haber planteado esta propuesta en la Pre-Asamblea, te diré que como sabes la Asamblea fue convocada con anterioridad y su orden del día ya estaba  aprobado y comunicado a los socios antes de la celebración de la Pre-Asamblea.
Además, nuestros Estatutos prevén la posibilidad de que lo que se manifiesta en la Pre-Asamblea se plantee por la Delegada de la Pre-Asamblea en la Asamblea, lo que, sin embargo, no ocurrió.
El Presidente, que contestó esta cuestión fuera del Orden del Día, y cuya intervención tampoco se recogió en el acta, propuso que al terminar los diferentes puntos del Orden del Día que exigían la intervención de la Asamblea con votaciones, y existiendo un espacio para ruegos y preguntas antes de las elecciones al Consejo, se podía utilizar este momento para tener el debate que planteabas.
Llegado este momento, cuando el Presidente dio la palabra no hubo ninguna intervención.
En relación a tu manifestación de que no estabas de acuerdo con la consideración del Director General de que no hay trato discriminatorio para con los socios, la intervención se ha recogido de forma resumida, tal y como expresan los Estatutos, y sin deformar el contenido de lo expresado.
2.- Por otra parte, has de tener en cuenta que nuestros estatutos establecen unas indicaciones muy precisas sobre el contenido de las actas y que entre otros datos, las mismas han de recoger un resumen de los asuntos discutidos, las intervenciones de la que se haya pedido que quede constancia, las decisiones adoptadas, los resultados de las votaciones con indicación de los votos emitidos a favor, en contra, nulos o en blanco, así como de aquellos socios que se hayan reservado su derecho a impugnar el acuerdo.
3.- Si tenemos en cuenta todo lo que te acabo de exponer, así como el hecho de que en ningún momento pediste que quedase constancia de tu intervención ni tampoco manifestaste tu deseo de que constase que te reservabas el derecho a impugnar ningún acuerdo, considero que el acta es conforme a las prescripciones de los estatutos y por ello, no ha de ser corregida.
No obstante todo lo anterior, quiero manifestarte también que estoy a tu entera disposición para aclararte cuanto consideres necesario.
Recibe un cordial saludo.
Andrés Nagel
Vicepresidente
Secretario del Consejo de Administración
VEGAP
 
 
De: perico pastor
Fecha: 5 de junio de 2012 18:04:51 GMT+02:00
Para: Vegap
Asunto: Re: Tu consulta

Querido Andrés (y querido Javier, que tan gentilmente redactas sus respuestas, supongo):

Disculpad que haya tardado en responder. No era complicado, pero no me sobra tiempo. Supongo que todo lo que aducís está dentro de la legalidad más estricta, pero siguen sin parecerme satisfactorias las actas. Sé que mi intervención estaba fuera de la orden del dia, pero creo que con un poco de buena voluntad se hubiera podido dar facilidades al debate. Lo que el acta no recoge es la tenacidad con la que Antón Patiño puso trabas al tema. 

Ignoraba que esas cuestiones debía presentarlas formalmente la Delegada de la Preasamblea, pero tampoco costaba nada pedirle a ella que lo hiciera: la tenias a vuestro lado. Otra muestra de vuestra poca disposición a abordar el tema. 

No debo ser el único que no entendió bien lo que dijo el Presidente (con mayúscula). Cuando pidió si había más ruegos y preguntas pensé que seguía refiriéndose al Orden del Día. Por eso no dije nada. Vaya.

En cuanto a mi discrepancia con Javier, cierto que se ha recogido de forma resumida, como dicen los Estatutos,  pero no es cierto que eso haya sido sin deformar el contenido de lo expresado.  En mi intervención me limité a señalar que no era exacta la afirmación de Javier de que para VEGAP no había diferencia entre el trato a los artistas en función de su fama. No tenia ninguna intención de ampliar el tema, pero tú me preguntaste si tenia datos y te dije que si: que me constaba que a Picasso Administration se le liquidaba con celeridad y que en mi caso tenia facturas pendientes, y no pequeñas, con VEGAP desde noviembre del 2010. No sé si soy un caso aislado, y no me quejo del trato que se le da a Picasso, pero no es el mismo que a mi, y, en cualquier caso, es inexcusable que una entidad de gestión haga tan mal la parte más mecánica de su trabajo. Huelga decir que me consta que las facturas pendientes se pagaron con rapidez, o sea que VEGAP ha retenido durante más de un año y medio, dinero que es mio. 

Lo pedir que algo conste en acta me parecia una cosa de película: en mi candidez imaginaba que las actas recogían con fidelidad razonable lo que se decía en un sitio (es lo que me habia explicado mi padre, que era notario...). Para otra vez ya lo sé.

Resumiendo, Andrés: que vuestras actas y tu respuesta no hacen sino refrendar lo que nos impulsó a presentar una candidatura que siempre supimos que no podía ganar,  que nunca soñamos que fuera a sacar un 40% de los votos, sin tiempo para prepararse, sin ninguna facilidad por vuestra parte. 

Nuestra candidatura sólo podía ser eso,un gesto. Un gesto para señalar la falta absoluta de comunicación entre VEGAP y sus socios, entre VEGAP y una gran cantidad de asociaciones, alguna de ellas corresponsables de la implantación de VEGAP. Es imperdonable que una entidad cuyos socios viven de la comunicación viva en la inopia más total respecto a las posibilidades de comunicación asequibles hoy en dia (revisa mi intercambio de mensajes con Javier y Bea respecto a la creación de un blog en .... 2009!) 

VEGAP ya casi no habla más que en víspera de elecciones. VEGAP no lleva a cabo correctamente ni las  tareas más elementales de licencia ni de liquidación. VEGAP, desde luego, no escucha, y cuando le llega un clamor como este 40% se cierra en banda. 

No pienso impugnar, ni redactar, ni someterme al tedio de vuestra prosa burocrática. Creo que ya he cumplido con mi presencia en la candidatura, en la PreAsamblea, en la Asamblea, y con mis comentarios, que constarán en al blog de REFUNDANDO VEGAP (que ya funciona, y que no cuesta un duro). 

Gracias por tu disposición, aunque no sea muy buena, y recibe saludo tan cordial como el tuyo

PERICO

lunes, 4 de junio de 2012

Carta al nuevo Consejo de Administración de VEGAP


Antón Patiño
Presidente en funciones de VEGAP
Madrid


Apreciado Antón,
En el debate postelectoral que hemos mantenido las personas que acudimos bajo el nombre de “Refundando Vegap” se ha producido un gran consenso sobre dos aspectos que te trasladamos a ti –presidente aún de Vegap- y al resto de compañer@s de la Candidatura Unitaria, ganadora de las elecciones.

En primer lugar, informaros de que Refundando Vegap continuará como grupo de opinión ampliándose, más allá de los veinte soci@s que originalmente hemos formado la candidatura, a numerosos soci@s que nos lo han pedido.

En segundo lugar, os pedimos formalmente la celebración, cuando antes mejor, de un encuentro con el nuevo Consejo de Administración de Vegap con el objetivo de analizar los resultados de las recientes elecciones, presentaros nuestras propuestas y prestaros todo el apoyo en aquellos ámbitos en los que podemos coincidir y que mejoren la entidad en eficacia, transparencia, participación y democracia.

Esperamos vuestra cita. Recibe y traslada un afectuoso saludo,
 
Refundando Vegap
4 de junio de 2012